miércoles, 26 de agosto de 2009

Me acabo de separar (I)

Aquí una nueva historia en tiempo real y por capítulos. Soledad nos lo relata así:


Cuando decidí contar mi historia era porque buscaba apoyo para no dejar ir a un gran hombre que me enseñó a querer y me mostró el significado de pareja y compañerismo (ya sé que es muy ñoño pero fue así, mi feo es lo más lindo que he tenido).Ahora lo cuento desde otro puesto… pues yo queridas señoras, desde ayer soy la ex de éste muchacho.

La historia comienza así … yo con 22 años recién cumplidos, con un título de Ingeniería bajo el brazo encontré un trabajo, el primero de mi vida. Para ponerle algo de contexto a la historia, les cuento que nunca tuve novios serios y los besos que dí se podían contar con los dedos de las manos. Me faltaba mucha vida, cosa que a él le sobra y aunque sólo tenemos 4 años de diferencia, la experiencia de vida es enorme.

Lo conocí en mi primer trabajo, nunca pasó de ser un compañero porque ni físicamente me gustaba, charlábamos muy poco sólo por cortesía, sabía de su hija y que ya no tenía nada con la madre, porque él le contaba eso a todo el mundo.

Después de dos meses en ese trabajo, conseguí uno mejor, me despedí de todos, incluyéndolo a él, les di dos besos y les desee que estén muy bien. Estaba sólo en mi oficina y pidió hablar conmigo, me dijo que de un tiempo a esta parte yo le interesaba más que como amiga, que le gustaba como mujer, como novia.

Lo tuve en espera de respuesta dos semanas y la verdad decidí aceptar como prueba, prometiéndome a mi misma que ésto no pasaría las dos semanas y seria un recuerdo en un mes. Claro esta que como era padre de una niña de tan sólo un año, yo le preguntaba por ella. Después de un mes de relación, me di cuenta que no sólo me gustaba si no que ya le tenía cariño.

Mi feo era especial, cariñoso de carácter, trabajador, atento, divertido, vale la pena me dije. Aún en mi inocencia dije: "tal vez pueda conocer a la madre de la niña para que se quede tranquila y no desconfié de mi, no tenemos por que pelear”.

Recuerdo una noche que estábamos en el cine y lo llamó porque la niña estaba con fiebre. Él me dijo: "después de la película voy a ver qué tiene" y yo me empeñé en suspender el cine para que él pueda ir inmediatamente, y todavía dije: "cuando sepas qué es me llamas para contarme".

Vivía en mi burbuja pensando que tenía ésto bajo control, hasta que recibí la llamada de la madre de la niña para reclamarme que estaba con él, que ella mantuvo y aún mantenía una relación, que él dormía todas las noches en su casa e incluso me describió como le hacía el amor cada noche... No colgué, no lloré, sólo escuché todo lo que me contó.

Entre todo lo que me dijo, me contó que ella era viuda con tres hijos y que su “Felipito” (mi novio) la acepto así y formaron una hermosa familia. Que yo era como muchas que él había tenido y va a tener siempre porque es “hombre”, y que seguro a los 3 meses me dejaba porque ella era su mujer.

¿Qué debí hacer en ese momento?

miércoles, 19 de agosto de 2009

Una historia en tiempo real...

Soy abogada, tengo 34 años y hace 12 convivo con el padre de mis tres hijos, pero ya no me hace feliz...

Así comienza un relato que llegó a la casilla de Matemos a los ex hace algunos días. Carol, la dueña de esta historia que transcurre en tiempo real, necesita un consejo para cambiar su vida y apela a nosotros, así que los invito a leer su historia y a ofrecerle una solución.


Trabajo en una organización de derechos humanos y en organizaciones de mujeres, el año pasado hice una maestría en género y dicto talleres sobre derechos de las mujeres.

Siempre estuve en contra de los hombres infieles que nos hacen tanto daño, de aquellos que incluso estando comprometidos y con hijos dicen ser solteros y, creía que por dignidad no sólo debían abandonar a la mujer que fue engañada pensando que era soltero, sino que también debía abandonarlo la mujer que estaba en casa con lo hijos, ya que este tipo de hombres no valen la pena.

Tengo 34 años y mi pareja tiene 38 años. Estamos juntos hace doce años. Cuando lo conocí recién terminaba con otro chico y como no me gusta la soledad me metí con él, al mes me embaracé y ése fue el inicio de nuestra unión. Ahora tenemos tres hermosos hijos. El es una buena persona, responsable conmigo y con mis hijos, ahorrativo, por lo cual tengo estabilidad económica y me ha apoyado para que siga superándome, es bastante cariñoso conmigo.

Siempre me ha respetado no tengo quejas en cuanto a su fidelidad, para él la traición rompe la confianza, uno de los cimientos de un hogar y no tengo quejas en cuanto a la sexualidad, disfruto mucho del sexo con él. Pero siento que no lo amo, que nunca lo amé, lo quiero mucho y creo que eso no es suficiente, me hace falta algo, quiero saber qué es amar. Además no me gusta que sea tan formal y serio, con mal carácter. Sí es amable, cariñoso y amoroso conmigo, pero me gustaría que sea un payaso, que siempre me haga reír y también un patán.

Alguna vez hablamos de hombres infieles y dijo que la mayoría lo son, que sus propios amigos le dicen que salga con otra chica pero que él se niega, le dicen que esta mal, que tiene problemas, que es una mandarina, a veces se siente mal de no ser como los otros. Pero dice que ahora su función es la de trabajar para buscar nuestro bienestar y lo mejor para nuestros hijos, que no puede estar jugando y poner en riesgo lo que más ama.

Durante el invierno acudía al trabajo bastante cubierta, pero ahora que es verano voy con poca ropa, una mini y una blusita delgada, como dicen mis amigas bastante sexy y algunas me dicen que ando mostrando las chichis, que ando despechugada. Al vestirme provocativa, un chico del trabajo me coqueteó primero y luego como le dí lugar, siguió con sus avances, me invitaba a tomar un café o a bailar, y le aceptaba, ahora me dice que esta enamorado de mi, que me ama, nos hemos besado e incluso le he permitido que me acaricie, que me mande mano.

Mi pareja descubrió que salía con alguien y le dije que a él no lo amaba, que nos unió mi inesperado embarazo, que no sentía nada por él y que podríamos llegar a un acuerdo de vivir en casa en camas separadas. Que me había enamorado del otro chico, pero que no se en realidad que me pasa, que continuaría con él y con mis hijos y que con el otro chico había terminado todo y no lo volvería a ver. Me creyó me dio una segunda oportunidad, pero lo volví a engañar con él.

No se qué me pasa, quiero a mis hijos y a mi pareja, aunque no lo amo. Pero me he enamorado de este chico, tan es así que llegue a descubrir que tenía mujer e hijos. Su mujer era una compañera de trabajo, cuando le reclamé me dijo que ya no la quería, que por pena estaba con ella, que vivían en cuartos separados, pero que es a mí a quien ama, y se lo creí y he seguido saliendo con él por varios meses.

Una amiga me dijo que aquello va contra mi condición de mujer, que me he convertido en su amante y que mi práctica está contra todo lo que predico, que dicto talleres de derechos de mujeres y niños donde hablo de dignidad y respeto, pero que no estoy siendo digna conmigo y al estar saliendo con él estoy atentando contra los derechos de su mujer y de sus hijos.

Tengo miedo de que mi pareja se canse de mi conducta, que descubra que sigo saliendo con el otro, no quiero perderlo, pero a la vez quiero estar con el otro chico. No entiendo porque estoy aceptando ser una amante, ser sólo un objeto sexual que está a disposición de él cuando me necesita y no está cuando lo llamo o lo necesito, ahí me responde con cualquier excusa, que está ocupado, que tiene mucho trabajo y se lo creo pero cuando él me llama salgo corriendo para verlo.

Cuando lo pienso, veo que está mal y todo debe terminar, pero el corazón es más fuerte. Estoy confundida, no se qué hacer, ¿en verdad éste chico me ama o sólo me quiere para entretenerse cuando me necesita?. ¿Debo dejar a mi pareja y a mis hijos por él?.

Por favor si me pueden ayudar con cualquier consejo, les agradezco...

miércoles, 12 de agosto de 2009

Del otro lado del mostrador II

El último post nos hizo reflexionar, porque al fin y al cabo, cada uno de nosotros es ex de alguien. Podemos ser mejores o peores, pero para la nueva pareja de ese "alguien" seremos un fantasma en algún momento, es inevitable. Y así fue como arrancaron a sincerarse, como sintieron la necesidad de hacerse cargo: yo soy de esas ex detestables y me encanta. Acá va confesión de Malala, otra de ellas:


Yo soy la ex que la nueva novia odia pero no se si ella sabe realmente quién soy, sino ya habría venido a asesinarme encapuchada en una noche oscura...

Yo soy la ex a la que él llama a horas insospechadas y de la que charla de los temas más inverosímiles durante horas...

Yo soy la ex a la que viene a ver cuando dice que se va a almorzar a lo de su abuela...

Yo soy la ex a la que él llama cada vez que toma una copa de más...

Yo soy la ex con la que ansía dormir...

Yo soy la ex que él extraña...

Yo soy la ex que él quiere en su cama...

Yo soy la ex con la que fantasea...

Yo soy la ex con los dotes culinarios que a él le gustan...

Yo soy la ex piola que no pregunta de más, que no cuestiona, que siempre lo escucha...

Yo soy la ex a la que le confiesa que está con ella por costumbre, por rutina, por hastío, por no estar solo los domingos por la tarde, para que alguien le sirva la merienda en la cama cuando se levanta de una noche de juerga...


Y él para mí es un pasatiempo, pero yo para él soy esa ex que ella eliminaría de la faz de la tierra si pudiera... al menos, yo querría eso para mí si fuese ella.

lunes, 3 de agosto de 2009

Del otro lado del mostrador...

Una y mil veces nos quejamos (y nos quejaremos) de los ex pero realmente, ¿cuántas veces reconocieron qué clase de ex son ustedes mismos?


Fui y soy todo tipo de ex:

A Novio uno: lo he dejado con culpa.

A Novio dos: lo he dejado sin culpa.

A Novio tres: lo he dejado irse tranquilo, me banqué la derrota con dignidad.

A Novio cuatro: merece post aparte.


Isadora es la primera en romper el hielo y ponerse del otro lado. "Yo fui la peor ex" dice sin ponerse colorada... A ver quién se anima a seguir confesando.



Yo soy y fui la peor ex. Yo fui la ex que todas las mujeres odiarían que su pareja tenga en su historial. Yo fui la ex que llamaba a cualquier hora en evidente estado etílico, la que lo buscaba, a quien él veía fin de semana de por medio.


- Sí, querida, era por mí que se iba temprano de tu casa.

- Sí querida, a mí me iba a buscar cuando abandonaba el boliche temprano.

- Sí, querida, a mí era a quién le mandaba mensajes.

- No, querida, no era Menganito quien lo bancaba triste y ofuscado; era yo, siempre yo.


Yo fui la ex implacable y nada lograron las mujercitas hacer conmigo, era la eterna latente.


Fui loca, puta, dulce, contenedora, sabia consejera, amiga, multifacética…durante casi dos años. Dos años en el que mi título era mi identidad, yo no era Isadora para el entorno de tu amado, yo era LA ex de la historia sin fin, LA ex de The Ex. LA ex, punto final (para el resto).

La ex de su vida.


Hoy, me río de mi. Me río fuerte y sostenido de la que fui, pero yo lo sé: Yo fui, señoras, la peor de todas.



Aprovecho para agradecer a Yo, la que olvidaste por este hermoso premio.

Y espero sus historias en: capitanitadelespacio@gmail.com